YA ESTAMOS GRANDES

Simón y yo vamos caminando por la vereda una tarde a la salida del cole. Al pasar junto a un gatito acostado al sol, Simón se le acerca y pega un gruñido tratando de asustarlo. "No, no asustes al gatito", le digo. "¿Por?" "Porque no, pobrecito. ¿A vos te gustaría que viniera un gigante y te asustara?" Simón me mira y con gesto sobrador, me devuelve: "A ver... ¿existen los gigantes?"
(5 AÑOS Y 1 MES)

No hay comentarios.: